Menos de 10 minutos después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara entusiasmado una inversión millonaria para ampliar el ya gigantesco Aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez, el líder del PSOE cambió el tono para señalar muy serio que “nos va la vida en mitigar y adaptarnos a los efectos ya reales del cambio climático”.
Puro retardismo climático. Pedro Sánchez sabe perfectamente que esos “efectos ya reales” del calentamiento global los causan actividades como la aviación, un sector que no para de crecer año tras año en pasajeros y emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, no está dispuesto a reconocer que ambas acciones no son compatibles.
Lo cierto es que Sánchez llegó a presidente del Gobierno prometiendo en su programa electoral la mejora del aeropuerto madrileño y el de otros tres: el Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, el de Tenerife Norte-Ciudad de la Laguna y el de Tenerife Sur. Sobre las mejoras del aeródromo catalán, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, aseguraba esta misma semana en el Congreso que su ampliación es una de las prioridades de su Gobierno. El objetivo es ampliar la tercera pista de las instalaciones.
Madrid tendrá un aeropuerto renovado mientras Navacerrada registra una anomalía en la temperatura media de 14 ºC en pleno invierno; Barcelona tendrá una pista más larga mientras Cataluña padece la peor sequía de la historia; y Tenerife aumentará su capacidad mientras sus costas son engullidas por la subida del nivel del mar y su clima se tropicaliza.
Y, aunque no figuraban en las promesas electorales del pasado 23J, el Gobierno (bajo la batuta del PSOE) tiene también planes de ampliación para el aeropuerto César Manrique-Lanzarote, además de la remodelación del aeropuerto de Palma de Mallorca, así como actuaciones en Melilla o Córdoba. A ello se le suma también las ampliaciones de varios puertos, siendo el más reciente el de Valencia.
El año pasado, 283 millones de personas pasaron por los aeropuertos de la red de Aena en España, casi un 3% más que en 2019, antes de la pandemia. A la cabeza están Madrid, con 60.220.984 de pasajeros (18,9% más frente a 2022), El Prat, con 49.909.544 (+19,9%), y Palma de Mallorca, con 31.105.987 (+8,9%).
La ampliación del principal aeropuerto de Madrid es, según Pedro Sánchez, “una extraordinaria noticia para Madrid y para el conjunto de España”, y considera que será “una seña de identidad de España”. Sin intención de hablar por todo el conjunto de la población española, en el ranking de prioridades y motivos de orgullo de los españoles y españolas es raro que figuren las mejoras de un aeropuerto. Muchas personas preferirán que se deje de despreciar al tren y se invierta más en él.
La transición ecológica (que da nombre a una de las tres vicepresidencias del Gobierno) implica no cometer los mismos errores que nos han llevado a donde estamos ahora. Poner la palabra sostenible a cualquier proyecto no implica que lo sea. Cuando se trata de incrementar infraestructuras para potenciar actividades contaminantes, lo más sostenible es dejar todo como está y, siendo coherentes, reducirlas.
En este extraño movimiento del PSOE (extraño por el empeño de quienes ponen tanto en valor la acción climática, no porque haya sido realmente una sorpresa) encontramos la oposición de su socio de Gobierno. Florent Marcellesi, coportavoz de Verdes Equo y miembro de la Ejecutiva de Sumar, considera que ampliar Barajas es una “irresponsabilidad climática” y pide al PSOE “coherencia ante la emergencia climática“.
Otra de las formaciones que integran Sumar, Más Madrid/Más País, ha afeado también el anuncio del líder socialista: “La nueva ampliación del aeropuerto de Barajas es un despropósito económico y ecológico y supone regresar a modelos del pasado”, ha escrito en Twitter Iñigo Errejón, recientemente elegido portavoz de la coalición en el Congreso. Y le ha recriminado su hipocresía: “El ecologismo empieza por casa, no es solo para hacerse fotos en las cumbres internacionales”. Un reproche al que ha contestado el ministro de Transportes. “Iñigo quiere viajar a Buenos Aires o a Hong Kong en tren. Estamos en ello, pero de momento es un poco difícil”, respondió Puente.
Por su parte, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun (Sumar), defiende que “seguir ampliando infraestructuras aeroportuarias cuestiona nuestras obligaciones internacionales para la lucha contra el cambio climático”.
Desde Greenpeace recuerdan el calor anormal que está viviendo el país este mes de enero y tachan de “inaceptable” el anuncio de Sánchez mientras su Gobierno “se llena la boca hablando de medio ambiente”. “Es todo lo contrario al progreso y el bienestar”, sostienen. Preguntados por Climática, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que dirige Teresa Ribera –referente en cuestiones climáticas a nivel mundial– prefiere no hacer “ninguna valoración, de momento”.
En plena crisis de clima, agua y biodiversidad, resultan igual de incomprensibles y retardistas los actos (tala de árboles, eliminación de carriles bici, etc.) de la derecha y ultraderecha que tanto denuncia el Gobierno de izquierdas como las inversiones millonarias que ellos mismos quieren hacer para que haya más aviones y turistas en España.
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Y encima lo anuncia entusiasmado.
Menos mal que están ahí los políticos progresistas de gobierno que tienen bastante más sensatez que él.
Pues tendré que dar la razón a las personas que dicen que sin los progres en el gobierno todo sería peor.
[Ciberacción] No dejemos paso a nuevos OMG
Como muchas personas desconocen, el Parlamento Europeo está debatiendo actualmente una nueva ley sobre nuevos organismos modificados genéticamente (OMG) que carece de controles de seguridad cruciales, trazabilidad obligatoria y etiquetado de los productos finales. Esto podría llevar a que alimentos genéticamente modificados no probados ni etiquetados acaben en nuestros campos y platos sin que lo sepamos.
Los nuevos OMG también amenazan nuestra salud y nuestro medio ambiente. Desconocemos los riesgos que entrañan y las consecuencias que tendrían. Los OMG que ya están en el mercado no han cumplido sus promesas, al contrario, no han respondido en absoluto a los problemas a los que se enfrenta la agricultura.
La legislación vigente sobre OMG es totalmente satisfactoria. Cualquier cambio pondría en peligro nuestra libertad de elegir, nuestra salud y nuestro medio ambiente.
La buena noticia es que no es demasiado tarde para luchar. Si mostramos la fuerza de nuestro movimiento, el Parlamento de la UE tendrá que escucharnos.
Firma ahora la carta dirigida a tus eurodiputadas y eurodiputados en esta página, pidiéndoles que no apoyen el proyecto de ley y envíala directamente a Bruselas.
Muchas gracias por tu apoyo.
https://www.ecologistasenaccion.org/307234/no-a-nuevos-omg/
Un despropósito por parte de Pedro Sánchez; aunque con la que le está cayendo al hombre, lo normal es que no ande muy acertado.
Cuantas maldiciones y negatividad debe estar aguantando este hombre, y vete a saber la de trabajos negros que habrán encargado para sacarlo de enmedio.
Sí, existen los trabajos negros.
Denuncian que la comisión sobre la ampliación del aeropuerto de El Prat sólo responde a las demandas de los grupos de interés empresariales y va en contra de los objetivos climáticos/ecológicos y de los intereses más básicos de la sociedad
La plataforma Zeroport, de la que forma parte Ecologistas en Acció de Catalunya, considera que con esta comisión bilateral , empeñada en buscar posibles ampliaciones del aeropuerto, los gobiernos del Estado y de la Generalitat demuestran priorizar la agenda de la patronal en detrimento de las políticas sociales y ambientales.
La capacidad del aeropuerto de El Prat no ha quedado pequeña, por mucho que insistan los lobbys empresariales, sino que es excesiva. Para valorar la dimensión de las infraestructuras de transporte, nunca deben tenerse en cuenta los intereses del mercado, sino el fomento de la justicia ambiental, climática y social basada en decisiones que pongan la vida de las personas en el centro y en beneficio del bien común.
La aviación es un sector absolutamente ligado a las emisiones, y no existen perspectivas significativas de sustituir los combustibles fósiles o de implantar una tecnología de aviación verde. La única opción sostenible es el decrecimiento de la aviación.
El deterioro ya adelantado del delta del Llobregat se agravará con cualquier actuación de ampliación del aeropuerto. Un incremento del número de vuelos tiene una afectación en la pérdida de biodiversidad de aves. Toda nueva construcción, tanto de alargamientos de pistas como de nuevas terminales, aumentará inevitablemente las emisiones de gases de efecto invernadero, intensificará el deterioro del Delta, provocará la pérdida de valiosos espacios naturales y agrarios, empeorará el estado de los acuíferos (siempre tan necesarios pero afectados por procesos de salinización, contaminación y excesiva impermeabilización del suelo) y deteriorará aún más las inestimables zonas húmedas…
https://www.ecologistasenaccion.org/307996/denuncien-que-la-comissio-sobre-lampliacio-de-laeroport-del-prat-nomes-respon-a-les-demandes-dels-g