El sector de las renovables alcanza los 11,5 millones de puestos de trabajo a escala mundial

Las energías renovables siguen generando beneficios socioeconómicos. Muestra de ello es que los empleos en el sector alcanzaron los 11,5 millones a escala mundial el año pasado, frente a los 11 millones de 2018. Las mujeres ocupan el 32% de estos puestos de trabajo, frente al 21% de los puestos en sectores relacionados con los combustibles fósiles. Estos datos se desprenden de la séptima edición del informe Renewable Energy and Jobs – Annual Review (Energía Renovable y Empleo: Análisis Anual), realizado por la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA).

La energía solar fotovoltaica registró alrededor de 3,8 millones, lo que supone un tercio del total. En 2019, el 87% del empleo mundial en el sector de la energía fotovoltaica se concentraba en los diez países que encabezan el despliegue mundial y la producción de equipamiento.

Le sigue de cerca el de los biocombustibles, con 2,5 millones. Muchos de estos empleos se encuentran en la cadena de suministro de la agricultura, concretamente en países como el Brasil, Colombia, Malasia, Filipinas y Tailandia, con una utilización intensiva de la mano de obra. En cuanto a las industrias de la energía eólica y la hidroeléctrica, cada una ha generado 2 millones y 1,2 millones de empleos, respectivamente.

«La adopción de renovables crea empleo y supone un impulso para los ingresos locales tanto en mercados de energía desarrollados como en aquellos que se encuentran en vías de desarrollo», asegura Francesco La Camera, director general de IRENA. Por países, Asia es quien lidera actualmente. En 2019, el 63 % de los empleos en el sector de las renovables se registraron allí.

España se encuentra entre los 10 primeros países en cuanto a puestos de trabajo en el sector de la energía eólica, aunque no en el de la energía solar fotovoltaica. El informe lo califica como un país que está experimentando un auge de interés público y privado en las energías renovables después de años de estancamiento, y según APPA, la Asociación Española de Energías Renovables, el sector experimentó un crecimiento del 10,7% en términos reales en 2018. Ese mismo año, estableció un nuevo récord de exportación de 4.700 millones de euros y contribuyó con 10.500 millones de euros al PIB, cerca del 1% del total de España (APPA, 2019).

Para sustentar este aumento del empleo en el sector de las renovables, el informe señala que es esencial la aplicación de políticas integrales, lideradas por medidas en los ámbitos de la educación y la capacitación, intervenciones en el mercado laboral y políticas industriales que respalden el aprovechamiento de las capacidades locales. En este sentido, apuntan a que los esfuerzos se relacionan con la formación profesional, el desarrollo curricular, la instrucción de profesores, el uso de la información y tecnologías de la comunicación, la promoción de asociaciones innovadoras entre los sectores público y privado y la contratación de grupos subrepresentados como el de las mujeres.

Desde IRENA afirman que con un programa de estímulo ambicioso se podrían crear hasta 5,5 millones de puestos de trabajo más en los próximos tres años que si se mantienen las prácticas habituales. Esta iniciativa también ayudaría al mundo a mantenerse en la senda de la creación de los 42 millones de empleos en el sector de las renovables de aquí al año 2050.