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Las élites mundiales consideran que la crisis climática es la mayor amenaza a la que se enfrenta la humanidad

El Foro Económico Mundial recoge en un informe las opiniones de líderes económicos y gubernamentales. Son conscientes del problema y manifiestan su inquietud, pero no aportan soluciones.
Protesta climática en Barcelona ante la inacción climática. Foto: Thiago Prudencio / SOPA Images

A corto, medio y largo plazo. La crisis climática es la principal amenaza a la que se enfrenta la humanidad, según se concluye en el Estudio de Percepción de Riesgos Globales 2022 del Foro Económico Mundial.

Un 84% de las personas encuestadas (especialistas en riesgos y líderes mundiales de empresas, gobiernos y sociedad civil) están preocupadas por el planeta. Pero ni la pandemia, ni la crisis de la deuda, ni la erosión de la cohesión social es lo que más les inquieta.

De aquí a dos años, consideran los eventos extremos –impulsados por el calentamiento global– el riesgo principal, mientras que el fracaso de la acción climática es el tercero a tener en cuenta.

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A medio plazo, de 2 a 5 años, el miedo a fracasar a la hora de hacer frente a la crisis climática se convierte en el principal riesgo, seguido de los eventos extremos (inundaciones, huracanes, incendios…). En el noveno puesto aparece también la pérdida de biodiversidad como una de las principales amenazas para la humanidad, según el estudio.

En cuanto a la próxima década, las cinco principales amenazas son medioambientales. La primera es, una vez más, el fracaso de la acción climática, acorde al 42% de los encuestados. Le siguen los eventos extremos, la pérdida de biodiversidad, la crisis de recursos naturales, y daños ambientales humanos.

Para los líderes españoles preguntados, las principales amenazas son el empleo y la crisis demográfica, el estancamiento económico y una posible crisis de deuda en países avanzados. La inacción climática es la cuarta preocupación.

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La inacción no es una opción

El informe, por tanto, viene a recordar lo que decenas de informes, estudios y análisis han dicho durante los últimos años, con escaso éxito: el coste de no actuar ante la crisis climática es mucho mayor que el de actuar para mitigar y adaptarse a los efectos del calentamiento global. Así lo ve también el presidente del Foro Económico Mundial, Børge Brende: “Nuestro planeta está en llamas y tenemos que lidiar con eso”.

Peter Giger, director de riesgos del Grupo Zurich, entidad aseguradora que colaboró en la elaboración del informe, ha apelado a la economía para combatir la crisis climática: “Si no se actúa sobre el cambio climático, el PIB mundial podría reducirse en una sexta parte. No es demasiado tarde para que los gobiernos y las empresas actúen ante los riesgos a los que se enfrentan e impulsen una transición innovadora, decidida e inclusiva que proteja a las economías y a las personas”. Evidentemente, Giger parece abrazar la supuesta bondad del crecimiento ilimitado y el mito del llamado «desarrollo sostenible».

Otro de los mensajes lanzados por la élite mundial y recogido en este documento es que la transición hacia emisiones netas cero para 2050 será “desordenada”, dadas “las complejidades del cambio tecnológico, económico y social a esta escala, y la naturaleza insuficiente de los compromisos actuales”.

Consideran importante abandonar la dependencia de los combustibles fósiles, pero al mismo tiempo insisten en que “el abandono de las industrias intensivas en carbono, que actualmente emplean a millones de trabajadores, desencadenará la volatilidad económica, profundizará el desempleo y aumentará las tensiones sociales y geopolíticas“. El punto sobre el que no se pronuncian en el informe es el que afecta a su propia rentabilidad: no es descabellado pensar que la volatilidad económica, el desempleo y las tensiones sociales y geopolíticas quizás tendrían menos impacto si ellos mismos renunciaran a una parte de sus beneficios económicos.

Este nuevo informe es el enésimo de una larga lista de documentos elaborados en los últimos años por las instituciones más importantes del mundo. Todos insisten en la misma idea: la crisis climática ya está ocurriendo, sus efectos ya son visibles, e irán aumentando a menos que se actúe.

La teoría está más que clara, el problema, una vez más, está en la práctica.

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COMENTARIOS

  1. Pues si me dan la opción de poder elegir entre el anterior capitalismo depredador y este “pseudo liberalismo disfrazado………….” ( pues también se apropiaron del término ” LIBERAL” ); me quedo sin duda con lo primero ,je,je .
    Salud.

  2. Hace décadas que tendríamos que HABER PASADO de las élites mundiales y de lo que dicen.
    Son los enemigos del ser humano y de nuestra casa de acogida: la Tierra.
    Escuchemos a ecologistas serios y honestos, a personas sinceras, y sin contaminar, como Greta, a científicos independientes, a toda persona que tiene un mínimo de sensiblidad, y percibe el sufrimiento y la agonía de las distintas especies que moramos en ella.

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